El bordado con
canutillo es la técnica más sencilla de bordado con hilo de oro. A pesar
de haberse empleado muy comúnmente durante todo el siglo XIX, siempre se ha
tratado esta técnica como la más pobre de todas y la de menor vistosidad y
apariencia. Sin embargo, es una técnica con la que se puede alcanzar grandes
virtuosismos si se emplea adecuadamente el material.
Bordado en canutillo de plata, vidrios y lentejuelas sobre seda. Siglo XIX |
Bordado en canutillo de oro sobre terciopelo. Siglo XIX |
El canutillo de oro consiste
en un fino hilo de metal (normalmente cobre plateado y dorado o bien plata dorada) que se enrolla sobre sí mismo, a modo de un muelle muy
largo y fino, a través del cual se introduce la hebra de hilo; normalmente se
rellena el interior de la figura con algodón o con varias pasadas de hilo, de tal forma que
al coser los trozos de canutillo éstos aparecen abultados, confiriéndole cierto
relieve a los motivos decorativos y dándole mayor vistosidad mediante la
combinación de canutillo mate, brillo y rizado además de enriquecerlos con
lentejuelas, vidrios y perlas. Normalmente, este tipo de piezas bordadas con
canutillo suelen estar realizadas directamente sobre la tela definitiva, bien
sea terciopelo, seda o raso, no obstante se suele tratar de piezas de pequeña
envergadura y complejidad, aunque también se pueden realizar en bastidores a
parte y, una vez terminadas, montar sobre la tela definitiva.
A continuación os dejo algunas fotografías de una toca que he realizado con canutillo de oro brillante, mate y rizado, además tiene lentejuelas, vidrios y perlas.
A continuación os dejo algunas fotografías de una toca que he realizado con canutillo de oro brillante, mate y rizado, además tiene lentejuelas, vidrios y perlas.